2 1 Yo me dije en mi corazón: "Ven ahora, Yo te probaré con regocijo y a disfrutar las buenas
cosas"; pero esto también es vanidad.
2 A la risa, dije: "Esto es locura," y al placer: "¿Cuál es
el sentido de ello?"[Am 6:3-6] 3 Examiné mi mente en cuanto a gratificar a mi cuerpo con vino, y
con mi corazón aun guiándome con sabiduría, cómo perseguir regocijo ; mi objetivo era
encontrar qué era lo mejor para la gente hacer durante el corto tiempo que ellos tienen debajo del
cielo para vivir.[ 8] 4 Yo trabajé en gran escala – me edifiqué palacios, planté viñas para mí, 5 y me
hice jardines y parques; en ellos planté toda clase de árboles frutales. 6 Me hice estanques de los
cuales regar los árboles de madera que brotaban en el bosque. 7 Compré esclavos y esclavas, y
también tenía mis esclavos nacidos en casa. También tenía cría de manadas de reses y rebaños de ovejas, más que nadie en Yerushalayim antes que yo.[ 9] 8 Amontoné plata y oro, la riqueza de
los reyes y provincias. Adquirí cantantes hombres y mujeres, cosas que proveen delicia sensual,
y una buena cantidad de mujeres sirvientas.
[10] 9 Así que me hice grandioso, sobrepasando a
todos los que me precedieron en Yerushalayim; mi sabiduría, también, fue establecida a mí.
10 No
negué a mis ojos nada que ellos querían. No retuve ningún regocijo de mi corazón; y mi corazón
se regocijó en todo mi trabajo, y ésta fue la porción de mi trabajo.[11] 11 Luego miré a todo lo que
mis manos habían logrado y en la obra que yo había trabajado; y contemplé que todo era vanidad
y rebeldía de ruaj, y que no hay nada ventajoso debajo del cielo.[Hab 2:13; 1T 6:6 -11; 1Jn 2:15-17]
12 Así que decidí mirar con más cuidado a la sabiduría, locura y necedad; pues ¿quién es
el hombre que seguirá el consejo, en todas las cosas donde lo emplea? 13 Yo vi que la sabiduría
excede a la necedad, así como la luz excede a la oscuridad.[Sal 119:105; Pr 4:1]
14 El hombre sabio tiene ojos en su cabeza,[Pr 17:24]
pero el necio camina en oscuridad.[1Jn 2:9]
Aun la misma suerte les espera a todos.
15 Así que dije en mi corazón: "Si la misma cosa le sucede al necio como a mí, entonces ¿qué
gané por tener sabiduría?" y dije además en mi corazón: "Esto también es vanidad, porque el
necio habla de su abundancia.
16 Pues el hombre sabio, como el necio, no serán recordados por
largo tiempo, considerando que como en tiempos venideros, todo hace tiempo habrá sido
olvidado. El hombre sabio, no menos que el necio, tiene que morir."[ 12]
17 Así que llegué a odiar la vida, porque las actividades hechas debajo del sol eran
aborrecibles para mí, puesto que todo es vanidad y rebeldía de ruaj.
[Nm 11.14]18 Yo odié todas las
cosas por las cuales había trabajado debajo del sol, porque vi que las tenía que dejar al hombre
que viniera después de mí. 19 ¿Quién sabe si él será un hombre sabio o un necio? Aun él tendrá
control sobre todas las cosas por las cuales yo trabajé y que demostraron qué sabio soy yo debajo
del sol. Esto también es vanidad.
20 Así qué vine a desechar de mi corazón todas las obras en las
cuales yo trabajé debajo del sol. 21 Aquí está un hombre cuyo trabajo está hecho con sabiduría,
conocimiento y fortaleza; aun él tiene que dejarlas a alguien que no ha puesto ningún trabajo en
ellas. Esto es no sólo vanidad, pero un gran mal. 22 Porque ¿qué es lo que la persona recoge de
todos sus esfuerzos y ambiciones dedicadas al trabajo que hace debajo del sol?[Mt 16:26; Fil 4:6; 1P 5:7]
23 Toda su vida es una de dolor, y de irritación de ruaj; aun de noche su corazón no tiene
descanso. Esto también es vanidad.
24 Así que no hay nada mejor para el hombre hacer que
comer, beber y dejarse disfrutar el bien que resulte de su trabajo. Yo también entendí que esto es de la mano de Elohim.[13] 25 Porque ¿quién comerá y quién beberá sin El? 26 Pues para el hombre
que es bueno a los ojos de Elohim, El da sabiduría, conocimiento y alegría; pero al pecador El da
problemas, la tarea de coleccionar y acumular cosas para dejar a aquel que es bueno a los ojos de
Elohim. Esto también es vanidad y rebeldía de ruaj.
[14]